En el tercer discurso de la Apología, Sócrates acepta la muerte decidida por el pueblo de Atenas. En esta oportunidad, el sabio debe confirmar si acepta la muerte cuando ya es inminente la ejecución. Critón le propone huir, Sócrates le ofrece el diálogo, y le explica que la necesidad de su muerte es su libertad. Traducción directa, introducción, notas y apéndices.